La periodontitis juvenil es un tipo de periodontitis (enfermedad de las encías) especial que aparece al principio de la adolescencia. Tiene una evolución rápida y agresiva y generalmente, el diagnóstico se realiza por casualidad. Se trata de pacientes jóvenes (13-18 años) que no presentan aparentemente signos de inflamación gingival e incluso en los primeros estadios de la enfermedad, no hay presencia de cálculo (sarro).
Suele afectar, inicialmente, a los incisivos y a los primeros molares, de manera bilateral y simétrica. Aunque al principio, es localizada, puede progresar y acabar afectando al resto de piezas dentales.
Está causada por unas bacterias específicas que deben tratarse mediante el uso de antibióticos (solos o en combinación) para acabar con todas las especies bacterianas causantes. En general, puede ser necesario realizar cirugía para despegar la encía y limpiar y sanear las superficies del diente para eliminar la placa. Después de seis meses, el ciclo antibiótico debería repetirse para asegurar la completa eliminación de las bacterias. El paciente deberá entrar en un ciclo de visitas de revisión y mantenimiento cada tres meses.
La periodontitis juvenil puede curarse completamente incluso en casos con una destrucción inicial del huso que rodea al diente.