martes, 31 de marzo de 2020

EL PACIENTE CON ASMA EN LA CLÍNICA DENTAL

Una dieta rica en pescado reduce los síntomas del asma infantil ...

El asma es una enfermedad inflamatoria de las vías respiratorias que se caracteriza por la obstrucción reversible de la vía aérea. Existen muchos tipos: alérgica (la más frecuente en niños) y otras que pueden estar inducidas por diversos agentes, como fármacos, ejercicio físico o infecciones.

Los pacientes asmáticos, tienen que acudir a la consulta y aportar en la historia, los datos detallados de su enfermedad: la frecuencia de sus crisis, los medicamentos que toma y es de vital importancia que recuerde traer su inhalador habitual a la clínica por si se requiere de su uso.

Por su parte, el equipo de la clínica intentará evitar los factores que puedan desencadenar una crisis asmática. Entre ellos, se encuentra reducir la ansiedad. Para ello, se intentará que el paciente no espere demasiado en la salita y, si es preciso, se pueden utilizar, con precaución, premedicación ansiolítica como el diacepam.

Se evitarán los antiinflamatorios y antihistamínicos que puedan desencadenar una crisis, Y el equipo estará preparado para actuar conforme a los protocolos en caso de que se produzca una crisis asmática durante la intervención. 

El paciente asmático crónico, no debe menospreciar la intervención dental y usar un broncodilatador preventivo (su medicación habitual) antes de su cita, ya que puede evitar que dichas crisis aparezcan. 

viernes, 27 de marzo de 2020

PROBLEMAS ORALES DEL PACIENTE INMUNODEPRIMIDO

INMUNODEPRESIÓN | Revista Adventista

El paciente inmunodeprimido, es aquel que tiene una alteración del sistema inmunitario, es decir, de las defensas del organismo. 

Esta inmunodepresión puede ser debida a múltiples causas: enfermedades, síndromes, fármacos (por ejemplo, a los pacientes que se les transplanta un órgano)

Estos pacientes requieren unos cuidados especiales en la clínica dental y en su salud general debido a las complicaciones que pueden aparecer en caso de infección.

Muchas veces, estos pacientes presentan lesiones o manifestaciones orales que pueden ser el primer signo de que existe una alteración de las defensas.

Son típicas, las úlceras orales, yagas de gran tamaño con bordes irregulares y generalmente dolorosas

Puede haber afectación de las encías y el hueso alrededor de los dientes. Existen dos patologías GUNA (Gingivitis Ulceronecrotizante Aguda) y PUNA (Periodontitis Ulceronecrotizante Aguda) que se asocian con frecuencia a sindomes que cursan con una disminución del sistema inmunitario como son el Síndrome de Down o el SIDA. 

Se pueden producir infecciones bacterianas que pueden sobreinfectar las úlceras orales y agravar o desencadenar un cuadro de septicemia si dichas bacterias pasan al torrente sanguíneo y se difunden por otros órganos y sistemas.

Son frecuentes también las infecciones por hongos, generalmente por cándida, que producen el conocido muguet o candidiasis que forma placas blanquecinas en las mucosas de la boca, que se desprenden dejando una superficie enrojecida. La candidiasis puede afectar también a la lengua (que adquiere una superficie lisa) o a las comisuras labiales (pasando a llamarse queilitis)

También pueden sufrir infecciones por virus, siendo el más frecuente, el virus del herpes que forma vesícuas que, si se rompen suelen provocar dolor. Por otro lado, el virus del papiloma humano, puede crecer formando verrugas en las mucosas orales. 

Por todo esto, es importante que estos pacientes acudan a revisiones rutinarias del dentista para detectar prematuramente cualquier patología que pueda agravar la situación de salud ya de por sí comprometida. Así mismo, los profesionales debemos estar preparados para, ante estos signos clínicos, derivar a los pacientes al médico especialista si sospechamos que pueda existir una inmunodeficiencia desconocida por el paciente.

miércoles, 18 de marzo de 2020

CONSECUENCIAS DEL REFLUJO GASTROESOFÁCICO EN LA SALUD ORAL

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El reflujo gastroesofágico es una enfermedad en la que el contenido gástrico del estómago pasa al esófago produciendo regurgitación y lesiones inflamatorias. Es muy frecuente en la sociedad actual y es una dolencia de tipo crónico con tendencia a repetirse. 

Además de manifestaciones como la tos, el asma, la afonía o la laringitis, pueden aparecer otras manifestaciones que afectan a la salud oral.

Mucho pacientes con reflujo presentan odinofagia y disfagia (dolores, molestias y dificultad para tragar). Pueden aparecer erosiones en partes blandas como mucosas de las mejillas o encías. Muchos de estos pacientes suelen describir una sensación de quemazón oral que puede mejorar con enjuagues o sprays anestésicos. El omeprazol (fármaco utilizado en pacientes con reflujo) puede producir disminución de la saliva (por lo que se aconseja utilizar chicles sin azúcar, estimulantes salivares o saliva artificial)

Los ácidos procedentes del reflujo provocan la erosión dental. La erosión dental se define como la pérdida de material dental sin la intervención de bacterias. En este caso, la erosión se produce por el efecto químico abrasivo de los ácidos gástricos. Estas erosiones son de evolución lenta y pueden pasar desapercibidas en los estadios iniciales de la enfermedad. En estado avanzados, la pérdida de esmalte y material dental se hace irreversible.

Por eso es importante, en estos pacientes, tener un control periódico con aplicaciones de flúor en altas concentraciones. En ocasiones se pueden realizar férulas nocturnas que cubran los dientes y evitar el desgaste de los mismos por acción de los ácidos. 

UN CONSEJO IMPORTANTE PARA LOS PACIENTES CON REFLUJO es que antes de cepillarse, se enjuaguen durante unos instantes con una solución alcalina para eliminar el ácido que pueda haber sobre las caras dentales ya que, de no hacerlo, la acción del ácido junto con la acción mecánica del cepillado puede ayudar a la abrasión de los dientes.

lunes, 9 de marzo de 2020

SOY UN(A) PACIENTE QUE TOMA ASPIRINA. QUÉ PRECAUCIONES TOMAR ANTE UN TRATAMIENTO DENTAL

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La aspirina (ácido acetilsalicílico) es un fármaco antiagregante que se utiliza para prevenir la formación de trombos inhibiendo la agregación de plaquetas en el lugar de una lesión. 

Los pacientes que toman aspirina pueden tener problemas de sangrado. Por eso, muchas veces surgen dudas a la hora del tratamiento dental.

Ante una extracción simple, no es necesario suspender el tratamiento. El odontólogo tomará todas las medidas necesarias para la correcta cicatrización de la herida (ampollas de ácido tranexámico [Amchafibrin], taponar el alveolo con esponjas de fibrina, sutura de la herida si es posible...)

Si el riego es mayor (ya sea por la dificultad de la extracción o por tratarse de cirugías más complejas), se debe realizar una consulta con el médico del paciente y dejar el tratamiento de aspirina al menos 3 días antes de la intervención para conseguir un porcentaje aceptable de nuevas plaquetas.

Es importante saber que el riego de sangrado en estos pacientes, se ve potenciado por el consumo de alcohol, la asociación con fármacos anticoagulantes (Sintrom), enfermedades crónicas del hígado y edad avanzada.