domingo, 29 de noviembre de 2015

CARILLAS SIN TALLADO

                
              Como publicamos hace tiempo, una forma de mejorar la estética de la sonrisa sin eliminar demasiado tejido dental consistía en la colocación de frentes laminados de porcelana, las conocidas carillas que ya se usaban en los años 30 en Estados Unidos por exigencias de algunos actores y actrices de Hollywood.

                Sin embargo, actualmente, empieza a extenderse el uso de una alternativa que requiere menor o ninguna eliminación de tejido dental: las carillas sin tallado.

                Con estas finas láminas de porcelana (0,3mm de espesor) que se adhieren al esmalte dental se pueden solucionar problemas de forma, posición y color sin tener que tocar la estructura del diente.

                Como no se daña el tejido dental, se pueden utilizar en pacientes jóvenes cuando sea preciso sin comprometer sus piezas. No requieren anestesia y la sensibilidad es nula o prácticamente inexistente. Proporcionan un blanqueamiento permanente de la sonrisa. Son rápidas de realizar (dos sesiones y sin necesidad de incómodos provisionales de resina)

                Pese a ser tan delgadas, tienen un comportamiento físico-mecánico similar a las carillas con tallado. Se estima que el éxito de estas carillas es del 99% a los 5 años y del 97% a los 15 años.


                No obstante, también presenta ciertos inconvenientes ya que no se pueden restaurar dientes con graves malposiciones o discrepancias de tamaño. Siempre existe un pequeño sobrecontorneado del diente ya que, al no tallarlo, la fina lámina se pega sobre esmalte y el diente aumenta en volumen (aunque sólo sean 0,3mm). De hecho, al ser tan finas, dejan ver a través de ellas el color del diente subyacente por lo que, si deseamos enmascarar un color oscuro (por un traumatismo, un tratamiento de conductos – endodoncia - o una tinción por tetraciclinas) deberemos valorar la necesidad o no de un blanqueamiento previo a su colocación. 

miércoles, 18 de noviembre de 2015

TRAUMATISMOS CORONARIOS


Actualmente, los traumatismos son la segunda causa de atención en Odontopediatría después de la caries dental. La fractura de corona no complicada (de esmalte y dentina) es el traumatismo más frecuente en dentición permanente.

La mayoría de las fracturas y luxaciones de los dientes resultan de accidentes. No suelen comprometer la vida de los pacientes pero pueden provocar un impacto social y psicológico importante ya que comúnmente aparecen en los dientes anteriores. 


Los traumatismos impactan al paciente y a sus familiares, profesores o cuidadores porque suele asociarse con sangrado y cortes en los tejidos blandos. En accidentes graves se pueden asociar a lesiones maxilofaciales o de otras partes del organismo.

La mayoría de traumatismos que sólo afectan a la corona del diente suelen producirse por caídas. También por accidentes de circulación, actividades físicas y actos de violencia (el síndrome del niño maltratado). También son frecuentes en pacientes con retraso mental y pacientes epilépticos durante sus crisis. 

 

Suelen ser más frecuentes en niños de sexo masculino, debido a que, por norma general, suelen realizar juegos o deportes mucho más agresivos y arriesgados que las niñas. Hay estudios que dice que uno de cada dos niños ha sufrido lesiones traumáticas dentarias durante la infancia o la adolescencia.


Suelen estar más afectados los incisivos superiores. Sobre todo en las conocidas Clases II donde el resalte (la distancia entre incisivos superiores e inferiores) es mayor. Estas fracturas suelen cursar con la pérdida de material dental y, en ocasiones, con el cambio de color del diente que indica la necrosis (muerte) del diente que puede precisar una desvitalización del mismo.

En la izquierda, imagen de una Clase II de Angle con resalte aumentado. En la derecha, fractura de incisivo superior con pérdida de material dental y necrosis pulpar con cambio de color.
(Los derechos de ésta y todas las imágenes quedan reservados a sus autores)

Los traumatismos de este tipo pueden reducirse usando medidas preventivas como, por ejemplo, un buen diagnóstico y tratamiento ortodóncico precoz para posicionar correctamente los dientes en sus arcada.




jueves, 12 de noviembre de 2015

CURIOSO ESTUDIO SOBRE SALUD ORAL Y CAPILAR


Hace unos meses pudimos leer en una de las revistas del sector odotológico un estudio interesante a la vez que curioso.

Un investigador estadounidense, ha realizado un trabajo titulado: "Las queratinas del pelo como componentes orgánicos estructurales del esmalte maduro: la relación entre los trastornos de pelo y la susceptibilidad a la caries dental"

Según su investigación, Olivier Duverger ha descubierto que las queratinas epiteliales del pelo son componentes también del esmalte dental. Esto puede ser debido a que el pelo y los dientes, aunque presentan componentes estructurales diferentes, tienen el mismo origen embrionario.

Así pues, las mutaciones en las queratinas del pelo aumentarían la susceptibilidad a la caries ya que reducirían la dureza del esmalte.


miércoles, 4 de noviembre de 2015

OSTEOGÉNESIS IMPERFECTA


En nuestro compromiso por enseñaros diferentes patologías de la cavidad oral o manifestaciones orales de ciertas enfermedades o síndromes, hoy os vamos a hablar de la Osteogénesis Imperfecta (OI).

La OI es una enfermedad hereditaria que se caracteriza por la formación anómala del colágeno tipo I, una proteína que forma parte de los huesos, tendones, ligamentos, piel y escleras (capas externas de los ojos, de color blanco). 

Se distingue 4 tipos de OI principales. El tipo I presenta fragilidad ósea, alteraciones en el crecimiento y escleras de color azul. El tipo II es letal e incompatible con la vida y los afectados suelen morir durante el parto o a los pocos días. En el resto de tipos aparecen escleras normales y mayor o menor grado de fracturas óseas.

Los pacientes con OI pueden presentar fracturas de los maxilares durante procesos sencillos como una extracción dental simple.

La OI se asocia comúnmente a la Dentinogénesis Imperfecta (DI), es decir a una formación defectuosa de la dentina (las capas internas) de los dientes. Los dientes adquieren un color gris, con grietas. En la radiografía (Fig.1), los dientes presentan una forma característica bulbosa con raíces cortas y con áreas de infección.

Fig. 1. Radiografía de un paciente con DI en su dentición permanente
*Los derechos de todas las imágenes quedan reservados a sus autores

Por desgracia, en muchos casos, estos dientes deben ser extraídos, incluso durante la infancia. Por eso eso, la rehabilitación con implantes dentales puede ser una posible solución para estos pacientes. Aunque se debe tener en cuenta que muchos toman bifosfonatos, una medicación que dificulta la colocación de los implantes por la posible aparición de necrosis (muerte) maxilar.

Actualmente, muchos bifosfonatos están siendo cambiados por otro medicamento, el Denosumab, con una vida media menor y que disminuyen las necrosis si se retira el medicamento unos seis meses antes.